Una de las cualidades de trabajar con CRM es que cada tipo de empresa tiene su CRM apropiado. La tecnología de base es la misma en todos los CRM, pero cada programa de gestión se puede adaptar al cliente final. Un CRM para entidades sociales o sin ánimo de lucro tiene unas identidades particulares. Porque las entidades culturales o sociales no tienen “clientes“, pero sí usuarios y asociados a los que hay que cuidar. Y para eso está precisamente el CRM.
CRM y entidades sociales… ¿seguro?
Las entidades sociales pueden ser reacias a elegir un programa de gestión comercial online. Igual sucede con las organizaciones culturales. Palabras como clientes o visitas comerciales tienden a ser entendidas por estas organizaciones al pie de la letra. ¿Cómo voy a usar un CRM para mi ONG si yo no vendo nada? llegan a decirnos. Por lo tanto, antes de elegir un CRM para entidades sociales debemos aclarar estos conceptos básicos.
Un primer fundamento es que cualquier fundación, ONG o entidad cultural puede no tener clientes… Pero siempre han perseguido alcanzar a cuanta más gente mejor. Las ONG tienen socias y voluntarios, algunos bien dispersos en las zonas de trabajo. Otras entidades culturales necesitan llegar al público para poder ganar más publicaciones o funciones. Tal como vimos analizando CRM para escritores, la idea de cliente abarca mucho más que la persona que compra en una tienda.
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Aun así es innegable que un CRM para entidades sociales debe asumir estas particularidades. Un CRM para ONG o fundaciones tiene que adaptarse a éstas, y no limitarse a copiar el modelo de cualquier otro programa de gestión comercial. Es más, el CRM para teatros, museos o galerías de arte tendrá,a primera vista, poco que ver con un CRM para fundaciones. Aunque los especialistas en CRM hablamos de “clientes”, para estas organizaciones debemos esforzarnos en pensar en público, usuarias o socios.
¿Qué aporta un CRM a las organizaciones sin ánimo de lucro?
Para cualquier organización social, la principal ventaja de utilizar CRM es poner a sus socias y usuarios en el centro de la estructura. De esta manera, un CRM para entidades sociales integra todos los departamentos. Socios, voluntariado, administración… Todos los contactos e interacciones en un mismo lugar. A partir de aquí, ya estamos facilitando el día a día. La elaboración de informes (de cara a subvenciones o partneriados) es automática, lo cual también nos hará más fácil ese trabajo.
Y por supuesto, la comunicación con los socios y benefactoras cambia radicalmente usando CRM. Las entidades sociales deben ser maestras en dar a conocer su labor. Para concienciar, y también por transparencia. Campañas de mail, donaciones, emergencias… Todas las interacciones con los usuarios y simpatizantes en una misma herramienta. Aquí nos ayudan tanto las etiquetas como el módulo Oportunidades. Y sus respuestas también quedan registradas.
CRM para personas
Un CRM para entidades sociales es ante todo una herramienta de gestión para personas. Aquí no hablaremos de objetivos, margen de beneficio, oportunidades o liquidación. Tampoco de ventas. Pero sí introduciremos nuevos matices a palabras como Campañas, Segmentación o Leads. Trabajaremos sobre logros, pero esos logros serán llegar a más personas y cambiar más vidas.
Un CRM para entidades no lucrativas permite a cualquier ONG reducir sus costes. Esto, cuando se trabaja con márgenes estrechos, es fundamental. También para aumentar la transparencia de nuestra gestión y justificar nuestros gastos de cara a donantes o Administraciones. La comunicación con los socios ayuda a éstos a sentirse más cerca, y por tanto, reduce también las bajas. Pero sobre todo nos permite a nosotros estar realmente más cerca de las personas a las que ayudamos, y de las que nos ayudan a ayudar.
En Trebede.com empezamos a gestionar CRM para entidades educativas. Así comenzó nuestra trayectoria con la filosofía CRM. Por eso entendemos bien las necesidades de organizaciones que no “venden” nada. La filosofía CRM trata de la gestión de equipos, de alcanzar logros juntos, y de trabajar mejor. Nadie más adecuado para entender este modelo de trabajo que las organizaciones no lucrativas.